Nacer mujer indígena significa descender de las mujeres estrellas—atsinay kates en wichí y huaqañi-huaqajñi en qom1—quienes, en los albores del tiempo, decidieron bajar del cielo y vivir con los hombres en esta tierra. Sin embargo, en Argentina, nacer mujer indígena significa enfrentarse a los múltiples impactos de la discriminación racial y de género, la pobreza y los efectos de un modelo de desarrollo que desplaza a las comunidades rurales, un proceso que se ha acelerado en las últimas décadas. En este contexto, las mujeres indígenas soportan una carga desproporcionada de tareas domésticas, de cuidado, violencia de género y maternidad precoz. Esto tiene un impacto notable en sus trayectorias educativas. Casi una de cada diez mujeres indígenas mayores de 55 años nunca asistió a la escuela y las tasas de alfabetización de las mujeres indígenas se encuentran entre las más bajas del país.
Para todos los niños y niñas indígenas, llegar a la edad escolar significa enfrentarse a los efectos de un sistema educativo diseñado para promover una matriz monocultural y monolingüe. El 90% de los niños indígenas que asisten a la escuela siguen sin recibir educación en sus idiomas. Un paso importante para abordar la protección de los derechos de los pueblos indígenas a una educación que promueva y proteja las culturas indígenas fue la adopción de políticas de Educación Intercultural Bilingüe (EIB) en 2006. La creación de una modalidad nacional de EIB contribuyó a la formación de docentes, el desarrollo de currículos, nuevos textos y la asignación de recursos para la educación de la niñez indígena. A su vez, la necesidad de contar con docentes interculturales y bilingües formados para las escuelas de EIB impulsó la aprobación de nuevas carreras de docencia y de becas para que los jóvenes indígenas accedan a estas carreras. Casi treinta años de trabajo sostenido por parte de las líderesas y líderes indígenas, las comunidades, así como de activistas, investigadores, educadores y ONGs, han contribuido al surgimiento de un nuevo actor: el docente indígena.
Los y las docentes indígenas realizan contribuciones cruciales a sus comunidades desempeñándose como mediadores culturales, diseñadores de proyectos, ambientalistas, promotores agrícolas locales, defensores de la tierra y traductores, entre otras funciones. Conectan a las niñas, niños y jóvenes con oportunidades educativas y otros derechos. Los y las docentes indígenas aportan una gran riqueza de conocimientos, valores culturales y perspectivas que, cuando se reconoce su importancia, enriquecen el aprendizaje de sus estudiantes y la vida de la escuela, tanto dentro como fuera de las modalidades de la EIB. Dadas sus propias trayectorias educativas, las maestras indígenas, en particular, tienen la posibilidad de liderar los cambios contra las normas, actitudes y prácticas de género limitantes. Tienen el potencial de establecer conexiones significativas con las familias y trabajar juntas para promover un ambiente más justo para la niñez, basado en valores culturales indígenas, como la complementariedad, relacionalidad, reciprocidad y colaboración.
En Argentina, a pesar del papel fundamental que desempeñan los y las docentes indígenas, las políticas educativas no se han focalizado en las barreras sistémicas que enfrentan las mujeres indígenas en su camino a la docencia. Durante los años de formación, se producen formas sutiles y explícitas de discriminación racial y de género, que persisten en los inicios de su carrera. Además, los programas de formación docente rara vez examinan cómo el currículo podría estar manteniendo normas, creencias y prácticas limitantes en temas de género. Al mismo tiempo, los programas de formación docente son espacios estratégicos para la transformación. Para combatir una forma de discriminación, como la discriminación étnica, es necesario abordar las injusticias interrelacionadas vinculadas a la discriminación de género y de clase. En estos espacios formativos, la teoría y la práctica podrían estar profundamente conectadas, proporcionando a los docentes la experiencia y herramientas necesarias para abordar estas desigualdades en sus futuras aulas.
En la actualidad, el número de escuelas de la EIB (754) y de carreras docentes interculturales y bilingües (al menos 16) ha abierto un espacio invaluable con el potencial de imaginar y poner en práctica una educación diferente, nacida desde el interior de las comunidades indígenas. No obstante, queda mucho por aprender sobre cómo apoyar la acción transformadora de las docentes indígenas. En primer lugar, explorando sus trayectorias educativas. Luego, aprovechando sus conocimientos para trascender las desigualdades étnicas y de género y crear entornos de aprendizaje de alta calidad.
Durante mi pasantía como becaria global Echidna 2025 en el Centro para la Educación Universal de The Brookings Institution, me focalizaré en comprender las experiencias de las mujeres indígenas en su camino hacia la docencia, identificando las barreras y los apoyos que encuentran en su trayectoria. A través de entrevistas narrativas, grupos focales y talleres participativos con estudiantes indígenas, líderes, promotores de la lengua y la cultura, y formadores de docentes, co-construiremos enfoques y herramientas que incorporen sus conocimientos para proteger los derechos de las niñas y mujeres indígenas a una educación reimaginada y enriquecida por los conocimientos y valores indígenas. Durante más de dos décadas he trabajado en aulas, escuelas y universidades con docentes de Argentina, Chile, Bolivia, Ecuador, México y Estados Unidos. He trabajado con docentes qom, moqoit, wichí y weenhayek, siendo testigo del amor por sus estudiantes, el cuidado por sus familias y sus esperanzas de un futuro más justo. Reconociendo la difícil coyuntura que enfrentamos, comparto la visión y el compromiso de los y las docentes indígenas que laboriosamente construyen a diario en sus aulas y comunidades. Resueno con el poema del intelectual wichí Lecko Zamora: Días luminosos, vendrán. / Los días en que los wichís danzarán, vendrán. / Las flores de los árboles, vendrán. / El tiempo de los peces, vendrá. / El tiempo de las mujeres-estrellas es ahora.
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Footnotes
- Agradezco al prof. Génaro por su colaboración con el idioma qom.
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Commentary
Nutriéndonos de la sabiduría de las maestras indígenas para una acción transformadora de género en Argentina
October 2, 2025